Santo Tomás y la postmodernidad
Resumo
El artículo esboza la tesis de que la llamada postmodernidad es el último estadio de la disolución de la síntesis medieval que alcanza su máxima expresión en la obra de Santo Tomás de Aquino. Se subraya el papel del beato Juan Duns Escoto en la introducción de un nuevo modo de pensar que termina mostrándose disolvente respecto de la orientación fundamental de la Patrística y la Escolástica. La defensa teológica de la libertad divina, que desemboca en el “voluntarismo teológico”, frente a los excesos intelectualistas de Avicena, termina descomponiendo la unidad analógica del ente, privado de consistencia metafísica por la radical contingencia que ese voluntarismo introduce en las esencias de los seres creados. El nominalismo ockhamista es una radicalización de esa misma forma de pensar, que pone su sello sobre toda la evolución filosófica posterior, hasta la actualidad, en el sentido de encerrar al intelecto en la inmanencia de sus propias representaciones sin contacto originario con el ser. Mientras que la “modernidad”, al menos en su vertiente racionalista, conservó, en forma a nuestro juicio incoherente, la noción de lo universal y absoluto, vemos la “postmodernidad” como una liquidación de esa incoherencia en el sentido de un intento serio de inmanentismo radical que desemboca lógicamente en el relativismo y el nihilismo.